La primera masculino de handball venció en un partidazo no apto para cardíacos a Regatas A 33-32. ‘La Bodeguita’ estuvo colmada y se vivió una verdadera fiesta.

Era promesa gran partido y el Tomba-Regatas no defraudó. Ambos equipos regalaron un partido infartante de principio a fin y el pueblo bodeguero cumplió con creces e hizo notar la localía con cantos y bombos.

En la primera parte el que salió mejor fue el visitante, que logró sacar cinco goles de diferencia apoyados en buenas atajadas de su arquero. Pero el Tomba con el correr de los minutos se fue acomodando, no perdonó en ofensiva y aparecieron las tapadas de Emilio Ferreyra en el arco pasó adelante en el marcador.

El encuentro seguía siendo muy parejo y palo a palo; tanto que el resultado final en el entretiempo fue 15-15.

La segunda parte mostró a un Godoy Cruz que se lo llevó por delante a Regatas; promediendo la mitad del tiempo el Expreso había sacado cuatro goles de diferencia. El tiempo jugaba a favor de Godoy Cruz, pero el equipo del Lago siempre es candidato y sacó su orgullo a flote y se puso a tiro del empate. El mismo lo lograría faltando segundos para el final y el Expreso tendría la última bola de la noche.

A falta de 4» para el final, el Tomba movió la pelota, la misma le llegó a Mauro Caballero que con un tiro lejano, con muchas manos tratando de bloquear, la puso junto a un palo y desató la locura en La Bodeguita. Fue final 33-32 y ahora el Tomba tendrá que vérsela con el multicampeón Maipú.

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