En el fútbol no existen las distancias, o tal vez existen, pero se mide en goles. Hoy Godoy Cruz jugó para estar cerca en el marcador, pero la efectividad y astucia del rival lo dejó muy lejos. Incluso, a mi criterio in-merecidamente demasiado lejos.

Los primeros minutos dejaron boquiabierto al próximo bicampeón del fútbol argentino. La dinámica de los volantes y la generación de Giménez desorientó al dueño de casa. Los tres de arriba (Garro, Morro y Correa) complicaron a la defensa y tras una habilitación del Morro llegó el centro de Abecasis para el ingreso en solitario de Leonel Galeano, antes de los 15, el Tomba estaba en ventaja.

Ahí a los 15 de la primera parte, Godoy Cruz estaba cerca del resultado deseado, con la propuesta elaborada, pero de a poco se fue alejando, los rivales también juegan y sacar a la visita del medio es su objetivo.Boca comenzó a cerrar los caminos del Tomba, le cortó el circuito de generación y fueron ellos los que se acercaron al tesoro de la victoria.

El empate de Pérez fue el primer obstáculo entre los tres puntos y El Expreso. Allí se generó una situación propicia para volver a ponerse a tiro, pero primero Correa y luego el Morro envuelto por marcadores no lograron vencer a Rossi. Estando a un paso, llegó el segundo de Pérez y otra vez, estirar la mano y no tocar a nadie.En el complemento Boca jugó a ser Estados Unidos y bloqueó a Godoy Cruz durante todo un tiempo. Consumido por la marca de dos rivales o más, Gastón Gímenez no tuvo relación con la pelota y Andrada lentamente se quedó sólo en el medio. Entre los volantes y los delanteros comenzó a generarse un abismo y allí el local terminó de alejar a su adversario de la victoria. Fracturó la zona de creación y esperó.

Al Tomba le costaba mucho esfuerzo romper ese bloqueo en la mitad de cancha y cada vez que lo conseguía quedaba expuesto, porque para imponerse necesitaba superioridad númerica, eso implicaba traer a sus defensores a zona de volantes, allí se generó un estancia, que Pavón y Nandez supieron aprovechar para marcar el tercer y cuarto gol.

Fue derrota, ante un gran rival, que debió batallar para vencer a un duro escollo. Aunque el marcador no lo demuestre, Boca debió ponerse el overol para quedarse con el triunfo. Godoy Cruz debe seguir por la senda del trabajo, la humildad y mantener la propuesta. Todos queremos ganar, pero manteniendo el libreto serán más los aplausos que los silbidos.