Opinión: Cristian Cruciani

Casi 20 días me separan de la nota que escribí antes del debut con Rosario Central (ver nota). Tal vez muchos sintieron lo mismo que yo, otros habrán preferido esperar, creo que hoy estamos en sintonía.

Es que el plantel bodeguero ha demostrado varios dotes en estas escasas fechas del Torneo Transición 2016, y el hincha lo percibe. Las virtudes que ha mostrado Godoy Cruz en tan solo 4 partidos ha despertado la ilusión de la parcialidad bodeguera y del propio plantel que desde el principio se sintió con fe.

Sin estrellas ni grandes presupuestos, este plantel se basa en la humildad y el trabajo en equipo. Por eso me animé a escribir, en aquel entonces, que no era un rejunte de jugadores sino un verdadero equipo que se basa en la solidaridad, el compromiso y el constante trabajo.

El público bodeguero tiene un paladar fino con el juego de Godoy Cruz. Le gusta que el equipo ataque en cualquier cancha, que busque ser protagonista de local y visitante, sin importar el rival que sea. Y por eso nos permitimos la ilusión. Porque debutamos ante Rosario Central, le hicimos un excelente partido y no merecimos perder. Porque ante Independiente merecimos la victoria y lo superamos ampliamente. Porque a River le manejamos la pelota en el Monumental y le ganamos con justicia. Y cómo no hablar del gran encuentro ante Colón que brilló tanto la defensa como el ataque, goleando a un equipo que vino a Mendoza con puntaje ideal.

Si hablamos de virtudes no podemos dejar de lado la capacidad de los jugadores que no entraron de titular pero cuando entraron lo hicieron de gran manera. Carabajal ante River que marcó el gol del triunfo, David Ramírez ante River y el Rojo que demostró que la magia sigue intacta, Garro y Emmanuel García ante Colón que entraron muy bien y Ángel González que marcó su primer gol en primera.

Pero tenemos que destacar también al cuerpo técnico que ha logrado una sana competencia, que ha trabajado incansablemente durante la pretemporada para que los jugadores hoy rindan, que supieron darle confianza a cada uno de los 30 que componen el plantel profesional y que le dieron las herramientas para potenciar el juego de Godoy Cruz.

Y por último, pero no menos importante, el apoyo incondicional del hincha. Que no hace otra cosa que alentar a los jugadores, que no entiende de otra cosa que no sea apoyar y asistir al Malvinas Argentinas.

Los elementos que componen a este gran Godoy Cruz están funcionando correctamente. Sigamos en este camino de búsqueda de objetivos, seguramente si transitamos por este sendero llegaremos a una buena estación. Vamos Expreso.

Somos Mendoza, Somos Godoy Cruz.