Rolando Bertolini fue un símbolo granate de la década del 80. Con la 5 tatuada en su espalda, el oriundo de Rosario, le dio a Lanús el ascenso a Primera División en cancha de Quilmes allá por el año 1990. Luego de su etapa como jugador el “Roly” incursionó en la Dirección Técnica de juveniles: Trabajó en Lanús, Racing, Astera Tripolis (Grecia), Mallorca (España) y Deportivo Cuenca (Ecuador). La historia reciente lo hizo Director Técnico de Tiro Federal, y finalmente coordinador de las Divisiones Inferiores de Godoy Cruz Antonio Tomba.

La entrevista tiene lugar en la sala de conferencias del Predio de Coquimbito. Bertolini se toma unos minutos para dialogar con la Revista Oficial. Habla en voz baja y denota seguridad, gesticula con sus manos y ocasionalmente bromea con los que pasan por ahí. Una pregunta da origen al artículo y queda en el aire acompañando el hilo conductor: ¿Cómo se trabaja a largo plazo en un fútbol que se caracteriza por la ausencia de proyectos? Pero antes dialogamos sobre los desafíos que implica el trabajo en el fútbol juvenil del club.

¿Qué balance haces de este primer semestre?

El balance es muy bueno porque llegué con el objetivo de formar un equipo de trabajo, o mejorarlo si ya estaba formado, y  encontré gente que quiere hacerlo. Cuando hablo de un “equipo de trabajo” me refiero a que sus integrantes entienden que no gana una categoría (Ej: quinta, sexta o séptima) sino que gana o pierde el club, porque los jugadores son de Godoy Cruz.

¿Cuáles son los valores que rescatás en un “equipo de trabajo”?

Es importante que todos estemos preocupados por todos. Para mí los técnicos de las categorías grandes deben estar pendientes de las categorías grandes y los técnicos de las categorías chicas, pendientes de las categorías chicas. Con esto quiero decir que debe haber una integración para que el jugador deje de ver “islas”. Somos 23 personas y es imposible llevarse bien con todos, pero sí es fundamental ser buenos compañeros de trabajo e interactuar.

Bertolini_Guajardo

¿En qué aspectos hemos evolucionado?

En el momento que llegué  me di cuenta que estábamos bien encaminados. Sin embargo, cuando uno llega siempre tiene cosas para aportar.

¿Cuáles son los momentos bisagra en la formación de juveniles?

En primer lugar el paso de pre-novena a novena, y en segundo lugar el de séptima a sexta. En el primer caso el juvenil termina de competir en Liga Mendocina y se encuentra con la realidad de que puede enfrentar a Boca Juniors por AFA. En tanto que el segundo caso es comparable al pasaje de “primaria” a “secundaria” porque el jugador se perfila y se encuentra con otro roce y otras responsabilidades. Nuestra obligación es preparar al chico para que no sufra esos cambios tan abruptos.

¿De qué manera?

Tenemos que lograr que las categorías lleguen lo más rodadas posibles al comienzo de la competencia de AFA (marzo de 2016).  Para eso, antes de fin de año, vamos a hacer una serie de amistosos con rivales de jerarquía como Boca, Lanús o Belgrano.

Pruebas_Juveniles

¿Cómo estamos en relación a esos clubes?

Ellos nos llevan algunos años de competencia pero nosotros vamos por buen camino, por eso digo que no estamos mal. Seguramente vamos a mejorar con la captación de jugadores y con la organización de una pensión para juveniles, tema ya hablado con el Presidente del club, pero lleva tiempo porque se abrió este “monstruo” (N. del E.: Predio de Coquimbito) y hay que mantenerlo en el día a día. La gente no tiene idea de que acá trabajan 13 categorías de 20 a 25 jugadores. Eso es mucha gente y no se trata sólo de tirarles una pelota

¿En qué aspectos mejora la formación el predio de Coquimbito y cómo la mejorará una pensión?

El complejo es de primer nivel mundial, acá nosotros trabajamos con mucha tranquilidad. Además a partir de febrero vamos a tener cinco canchas más, entonces vamos a poder rotarlas y entrenar con pasto, que no es lo mismo que hacerlo con tierra.

Respecto de la pensión yo creo que no hay que copiar a los clubes que tienen 180 o 200 jugadores alojados. Nosotros tenemos que empezar con tres jugadores por cada una de las categorías más grandes (cuarta, quinta, sexta y séptima), no tenemos que volvernos locos porque después se hace inmanejable. Yo siempre digo que el jugador de afuera tiene que ser titular en AFA, porque así se justifica la inversión y es recuperable. Por el momento damos viandas, viáticos y abonos; en ese sentido Godoy Cruz gasta fortuna, y eso la gente no lo sabe.

Tanque_Coquimbito

¿En cuánto tiempo el proceso de formación de juveniles se estabiliza?

Los procesos de juveniles demoran entre tres y cinco años. El problema es que este predio se abrió y las categorías (primera, reserva y juveniles)  vinieron a competir. Eso te obliga a que tengas que trabajar, mejorar y ordenar a la par de una competencia que es cruel. Digo esto porque a los equipos de Buenos Aires no les gusta viajar hasta acá y quieren jugar entre ellos, entonces vos te sentís desplazado y estás siempre renegando contra eso. A nosotros AFA nos da un plus de calidad para saber dónde estamos parados, al igual que la Liga Mendocina, por eso tenemos que competir en ambas, y bien.

Decís que competir en AFA nos da una medida de dónde estamos parados. ¿Qué nivel de competencia tenemos entonces?

Nosotros estamos bien. Los amistosos con los primeros de la tabla general nos van a decir realmente dónde estamos parados y vamos a poder cerrar el año con una justa medida del aspecto físico, técnico, táctico y futbolístico. Además esto nos va a servir para lograr una integración entre preparadores físicos y técnicos, y eso nos servirá para seguir mejorando.

¿Esos tres son los clubes espejo para Godoy Cruz?

Yo creo que Lanús y Belgrano son clubes que han trabajado muy bien a nivel dirigencial y tienen dos de los mejores complejos -Belgrano mucho más que Lanús-. Nosotros nos asemejamos al predio que tiene Belgrano aunque yo creo que este va a ser mejor cuando esté terminado. Ellos tienen algo muy bueno: Hace diez años que empezaron y recién ahora los coordinadores te dicen “podemos tomar un mate tranquilos” (risas).

Es mucho trabajo…

Es una gran acumulación de trabajo y recién ahora están peleando ahí arriba. Además tienen la Liga Cordobesa, como nosotros, por eso digo que se puede pero lleva tiempo.

Mencionaste recién un aspecto importante que es el dirigencial ¿Qué te encontraste acá?

Desde que llegué me di cuenta que el apoyo del Presidente y su gente ha sido fundamental. Encontré gente joven que quiere mejorar, que quiere seguir haciendo las cosas bien, y que por sobre todo quiere al club. A mí eso me gusta porque cuando querés a tu club, cuando sos hincha del club, hay sentido de pertenencia y uno se da cuenta de eso enseguida con sólo mirarles las caras. Para mí si vienen veinte tipos de afuera no sirve, a mí me gusta que la gente de acá crezca  y  se capacite -tanto los preparadores físicos como los técnicos- y espero que el día de mañana, cuando me vaya, haya dejado algo a nivel formativo.

Llegamos a un tema central de esta entrevista ¿Cómo se trabaja a largo plazo en un fútbol argentino que se caracteriza por la ausencia de proyectos?

Al formar el equipo de trabajo lograremos que, pase lo que pase arriba, la estructura no se rompa. Estos seis meses estuve viendo y evaluando a la gente, pero yo quiero que la estructura del fútbol juvenil de Godoy Cruz, a partir del 8 de enero, no sea más tocada para darle estabilidad. Estos primeros seis meses han sido de análisis y trabajo para formar el equipo de trabajo. A partir de ahora, y hasta el 8 de diciembre, vamos a trabajar para que cada técnico y cada preparador físico sepa en qué categoría trabajará desde el 8 de enero. Quiero hacer los cambios antes para que el cuerpo técnico vaya conociendo la categoría con la que va a trabajar el año que viene.

En la misma línea ¿Cómo le explicas el fútbol a largo plazo a alguien (jugador, técnico, preparador físico o dirigente) que está inmerso en este fútbol tan cortoplacista? 

Si yo les digo que el resultado no importa les estaría mintiendo a todos. A mí me gusta competir con resultados y yo creo que el jugador se tiene que acostumbrar a ganar, a salir campeón y a pelear arriba. Yo creo que eso es lo que me sirve a mí y al club, porque acá ganamos todos o perdemos todos.

Entonces el resultado es parte de la formación del juvenil

Y sí porque vos vas a jugar a Boca y se te llena Casa Amarilla: Hay gritos, insultos, treinta o cuarenta representantes y está tu Presidente. Entonces cómo le decís al jugador que el resultado no importa, cómo le decís que no juegue, que no meta, que no defienda el resultado. No podés, es imposible, tenés que tener sangre de pato y yo no soy así, a mí me gusta ganar. Hay cosas en las que ya estoy formado y no me van a cambiar de viejo. Pero vos me dirás: “Estamos en juveniles” y para mí es lo mismo porque el jugador se tiene que acostumbrar a competir porque cuando llega a reserva y primera no se le puede decir que no compita, que no pelee un ascenso, un campeonato, una copa. Obviamente que los mensajes son un poco más light, pero son mensajes que tenemos que dar porque más arriba se los van a pedir.

Eso es cierto, pero me da la sensación que muchas veces nos perdemos de buenos proyectos por entrar en esta locura del resultado ¿Coincidís?

El otro día leí una nota de Maximiliano Morález en el El Gráfico. Maxi mide 1,60 mts y en octava era una pulga. Ahora sigue siendo una pulga, pero es uno de los mejores jugadores de Europa. Lo que quiero decir con esto es que a los jugadores técnicamente buenos tenés que bancarlos hasta el final, hasta los 19 o 20 años, porque siempre van a tener chance de jugar. Nosotros en la categoría 2002 tenemos dos colombianos, dos cortitos, que técnicamente son los mejores y qué les voy a decir, tenés que tratar de mimarlos un poco dentro de la competencia. Por ahí no los vas a poner de arranque, pero los podés poner un rato. Cuando son más chiquitos los tenés que proteger un poco, pero cuando ellos se van a dormir quieren ganar.

Bertolini

¿Y en Primera División?

En Primera División los proyectos son muy difíciles de ejecutar. En juveniles, por el contrario, los resultados se dan a largo plazo. Esto degasta mucho porque los últimos dos meses son importantes por la captación de jugadores, a principio de año por la pretemporada y en el medio por la competencia. En el fútbol juvenil no podés descansar porque lo ideal es mantener siempre la misma intensidad y tener claro hacia dónde vas, y yo vine a formar un proyecto de juveniles.