Godoy Cruz ganó un partidazo en el debut en Tucumán. Con gol de uno de los debutantes Tomás Badaloni, el Tomba venció en una de las últimas del partido 1-0 a Atlético Tucumán.

El primer tiempo mostró a un Godoy Cruz que desde el primer momento buscó la presión alta para lastimar al rival; pero el conjunto tucumano se sintió más cómodo en los primeros minutos y a pesar de ser un encuentro muy parejo y luchado en mitad de cancha, sacó un poco de diferencias con algunas aproximaciones sin mucho peligro, a excepción de una media vuelta de Peralta que despejó muy bien Ramiro Martínez.

Después de los primeros quince minutos el Tomba se empezó a sentir más cómodo haciéndose eco en el manejo de pelota de Burgoa y Manzur sumado a las corridas de Lencinas, que lograron poner avisos en el arco local, pero sin tener muchas opciones claras.

Después de la mitad del primer tiempo el encuentro se volvió muy parejo y solamente el local tuvo dos chances, donde nuevamente respondió bien Martínez, y el encuentro se iría al descanso 0-0.

En la segunda parte, el Tomba se hizo más protagonista y empezó a tener situaciones claras con las proyecciones hasta el fondo de Lencinas, pero el encuentro seguía siendo parejo.

El equipo local no inquietaba mucho a Martínez, pero cada vez que llegaba hacía lucir al 1 tombino. Dabove empezó a mover el banco y mandó a la cancha a tres debutantes, Daniel Molina categoría 1999 y Ezequiel Bullaude y Tomás Badaloni categorías 2000 le dieron más vértigo al ataque bodeguero.

Y en una de las últimas del partido un gran pase de Agustín Manzur, dejó sólo a Badaloni que abrió el pie y con una exquisita definición puso el 1-0 a los 45’ de la segunda parte, con el que el Tomba se quedó con los primeros tres puntos de este torneo en una cancha muy complicada.

El conjunto de Dabove plagados de pibes comenzó con el pie derecho y esperará a Talleres que será el próximo rival en Mendoza. Las otras positivas de la mañana fueron la buena actuación de Ramiro Martínez y que Juan Andrada volvió a jugar después de nueve meses, el puntano jugó los 90’.